Fotografía: Jordi Bernadó vía puig-mir
Situada en la leridana localidad de La Pobla de Cérvoles en un terreno junto a una formación rocosa, una plantación de almendros y un antiguo depósito en desuso; la vivienda llevada a cabo por los arquitectos Carles Puig y Mª Antonia Mir se desarrolla con el fin de minimizar la huella de la construcción, conseguir relacionar la pieza con su entorno inmediato y responder a unas exigencias presupuestarias austeras.
Colocada ligeramente elevada sobre el propio depósito y en sentido transversal al mismo como puente y entre dos almendros para respetar al máximo las preexistencias; la vivienda de única planta se organiza de manera que dos franjas, una de un espacio polivalente y la otra del cuerpo de servicios de instalaciones, responden de diferente manera a las orientaciones contrapuestas de las fachadas principales del cuerpo.
Este espacio polivalente ofrece multitud de relaciones y usos, además de permitir la observación y asimilación de la dimensión de la parcela en la longitud perpendicular del antiguo depósito.
Debido al ajustado presupuesto y a la voluntad de llevar a cabo revestimientos “no-acabados”, paramentos de yeso, madera y hormigón se barnizan participando de la atmosfera austera y básica.
La fachada de revoco con pigmentos terrosos, junto con el acabado de las carpinterías, terminan por caracterizar el volumen además de asegurar su integración con las cercanas formaciones rocosas.
Año: 2011-2012
Superficie: 156m2
Presupuesto: 845€/m2
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