22.8.13

Silla Paimio, Alvar Aalto

Fuente: tectónicablog



“Deberíamos esforzarnos en la producción de artículos sencillos, buenos, sin decoración, pero artículos que estuvieran en armonía con el ser humano y que se adaptasen orgánicamente al hombre de la calle.”
La silla número 41, posteriormente conocida como silla Paimio, diseñada como parte de la obra integral del sanatorio antituberculoso de Paimio de 1933; resulta una pieza fundamental para acercarse no solamente a los conceptos de diseño si no también a las ideas arquitectónicas del maestro finlandés Alvar Aalto (1888-1976).

La construcción del sanatorio coincide con una época de preocupación y esfuerzo europeo por la creación de edificios humanistas e higeneistas para combatir la tuberculosis; y es en esta obra en la que, gracias a una concepción unitaria en la que todos los elementos de diseño, definición de espacios interiores y mobiliario trascienden el valor de la tradición nórdico presentes en la obra de Aalto, el objetivo prioritario pasa a ser la función humana de la arquitectura.

A parte de la definición de los elementos de las diferentes estancias y la preocupación por la iluminación de los espacios comunes, la disposición de terrazas y espacios de descanso lleva a la concreción, junto con la ayuda de médicos en el estudio previo sobre la forma de la misma, de la silla Paimio, destinada para prolongadas estancias y en la que tanto la comodidad como la ayuda pasiva a la respiración de los pacientes eran prioridades de diseño.

Para dicho fin y continuando tanto los estudios del propio Aalto en la elaboración de mobiliario con madera laminada como con la precursora silla Wassily de Marcel Breuer, la pieza queda conformada por una base de madera laminada y plegada cuya única pieza de respaldo y asiento forma un ángulo óptimo para las necesidades médicas anteriores.

La elección de la madera viene determinada, más allá de los motivos de producción y la facilidad de curvar la misma sin necesidad de cortes, por la naturaleza del edificio; en el que una menor conductividad térmica y una mayor absorción acústica eran necesarias.

Año: 1931
Cuerpo: Única pieza de madera terciada curvada de abedul para asiento y respaldo.
Estructura: Madera de haya laminada y curvada.



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